Recibo un buen día de enero un email de ProntoPro, concretamente de su directora de contenidos digitales Marta Sánchez, en el que me propone publicar una entrevista conmigo.
Las preguntas me llevaron a volver a plantearme cuestiones que hace tiempos respondí y que me agradó volver a cuestionarme. Fue como mirarles nuevamente de frente con una mirada actual, con lo que soy ahora, con lo que quiero hacer de aquí en adelante.
He respondido a preguntas como:
¿Cuánta importancia tiene este idioma para mí? ¿Cuáles son las principales diferencias entre el hebreo antiguo y hebreo moderno?¿Por qué es bueno aprender hebreo moderno en la actualidad? ¿Qué beneficios trae? ¿Qué dificultades puede encontrar aquél que quiere aprender hebreo?